Cuando Pierre Balmain fundó la Maison de alta costura del mismo nombre en el otoño de 1945, se atrevió a hacer una apuesta arriesgada. Tras varios años de guerra, invasión y ocupación, el diseñador estaba determinado a creer en las posibilidades de los nuevos comienzos y en un futuro lleno de esperanza. Desafiando audazmente las ideas preconcebidas, Pierre Balmain y un grupo de jóvenes talentos atrevidos fueron los artífices del renacimiento histórico de posguerra, que corroboró el estatuto de París como capital de la moda.

El impresionante diseño jacquard que viste las cuatro siluetas adopta y actualiza uno de los motivos característicos de la Maison que adorna algunos diseños ready-to-wear de Balmain para hombre y mujer, así como una gran cantidad de accesorios de principios de los años setenta. Naturalmente, la icónica letra "B" hace referencia al fundador y su Maison, mientras que la letra "P" entrelazada evoca a Pierre y París, la ciudad íntimamente ligada a la historia y las creaciones de Balmain.

El motivo Labyrinth de Balmain también refleja la fascinación de Pierre Balmain durante toda su vida por los complicados dédalos de los más bellos jardines renacentistas de Francia. Balmain se inspiró en los castillos clásicos y los jardines de Francia para bautizar muchas de sus colecciones de alta costura. El ingenioso motivo inspirado en un laberinto realza su pasión por el excepcional legado del diseño francés.

La línea de complementos de 1945 formada por diseños de piel suave con elegantes contrastes de marfil y negro destaca uno de los códigos más reconocibles de la Maison: la pasión que comparten Pierre Balmain y Olivier Rousteing por los patrones monocromáticos en contraste dinámico.